El tomate es un producto de belleza maravilloso: efectivo, natural y al alcance del bolsillo. Su poder embellecedor se lo debe a un pigmento llamado licopeno.
El licopeno neutraliza los radicales libre que envejecen nuestra piel y estimula la producción de colágeno, la proteína que mantiene la elasticidad y suavidad de la piel.
La mejor manera de aprovechar el licopeno es cocinando los tomates (salsa de tomate, sopa de tomate, mermelada de tomate) o aplicando el tomate directamente sobre la piel, en forma de las siguientes mascarillas caseras para la cara:
Mascarilla de tomate y miel
Beneficios
- Humecta y rejuvenece la piel seca y mayor.
- Disminuye las manchas e imperfecciones de la piel.
Ingredientes
- 1 cucharada de pulpa de tomate orgánico.
- 1 cucharadita de miel.
- 1 cucharadita de yogur natural.
Preparación
Mezcla todos los ingredientes y aplica en tu rostro limpio. Deja actuar por 20 a 30 minutos. Retira la mascarilla con agua tibia. Aplícate la crema humectante.
Mascarilla de tomate y pepino
Beneficios
- Alivia las quemaduras de la piel y reduce la pigmentación por exceso de sol.
- Revitaliza la piel cansada y le da más brillo a tu rostro.
Ingredientes
- ¼ de tomate pelado orgánico y sin semillas.
- 3 cucharaditas de yogur natural.
- 1 cucharadita de pepino pelado y rallado.
- 1 cucharada de gel de aloe vera.
- 3 cucharadas de avena molida finamente.
Preparación
Mezcla todos los ingredientes y aplícalo en tu rostro. Déjalo por 10 minutos y lava tu cara con agua tibia. Aplícate el tónico y el humectante.
Mascarilla de tomate y azúcar
Beneficios
- Remueve los puntos negros de la cara.
- Suaviza la piel.
Ingredientes
- 1 tomate orgánico.
- 1 cucharadita de azúcar granulado fino
Preparación
Corta el tomate en rodajas y échale el azúcar encima. Aplícate las rodajas en el rostro con movimientos circulares en todo el rostro, deja actuar por 10 minutos. Enjuaga y aplícate el astringente y el humectante.
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me encantaron estas mascarillas de tomate
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