Cuando la mujer llega a las 40, notará que su cabello se pondrá seco, tendrá menos brillo, y será más fino, por tanto, se quebrará con más facilidad que antes.
Al igual que la piel, el cabello también envejece con la llegada de la menopausia…es la ley de la vida. No obstante, la clave es identificarlos y saber qué hacer para aminorar los efectos del paso del tiempo.
1. Textura: La curvatura del cabello cambia, se vuelve áspero, crespo, más difícil de manejar. Cada mechón de este tipo significa un punto débil en el cabello.
Qué hacer: Cepilla tu cabello menos seguido y con bastante cuidado. El cepillado rompe la cutícula del pelo, por tanto, es mejor utilizar un peine de dientes muy separados. Utiliza productos para cabello dañado y que lo dejen suave.
2. Sequedad: Con la menopausia el cuero cabelludo dejar de producir menos sebo, por eso cada día lo notarás más seco. El sebo no es suciedad, cumple una función: es el acondicionador natural del pelo, además lo protege del calor y la fricción.
Qué hacer: Reduce la frecuencia con la que te lavas el pelo y empieza a utilizar un champú para cabello seco. También son bunas las mascarillas hidratantes para el pelo.
3. Adelgazamiento: el número de fibras de tu cabello empieza a disminuir a partir de los 20, y cuando llegas a los 60, ya ha disminuido en 30% a 35%. En los 40, el diámetro del cabello empieza a reducirse debido a los cambios hormonales.
Qué hacer: Utiliza un champú enriquecido con keratina y un acondicionador humectante, también puedes usar productos para las raíces y así lograr mayor volumen. Deja de usar planchas y rizadores, así como secadores en modo caliente.
4. Decoloración: Con el paso de los años el cuero cabelludo deja de producir menos melanina, la sustancia que le da color al cabello, lo protege de los rayos UV y le da brillo.
Qué hacer: Tiñe tu cabello en colores cálidos como el marrón chocolate o el rubio dorado, que son colores que logran cubrir bien las canas y suavizan tus facciones.
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