La ropa te cuesta el dinero que ganas trabajando duro, y además, la quieres, porque es tuya y te hace verte bien. Entonces, resulta lógico aplicar los cuidados necesarios para que se conserve en buen estado por largo tiempo, ¿no?
Hacer que la ropa dure más requiere que seas organizado(a) y cuidadoso(a) durante el lavado, el planchado, el doblado y el guardado. Sí, lo sé. Es una inversión de tiempo, pero que paga bien por cada centavo que pagaste por ese vestido o ese saco carísimo que solo tú y otros pocos elegidos poseen.